Tagline:
Hoy me di cuenta que lo que realmente me producía miedo, no me molesta. Sino al contrario a veces ni siquiera me doy cuenta. Siempre he oído decir que Tuviera cuidado con lo que pedía pues se me podría cumplir, todos los años de mi infancia, adolescencia y en el principio de la juventud, fui un rebelde sin causa aparente, los limites sociales y morales no eran aplicables a mi, estaban diseñados para otras personas que formaban parte de esa falsedad llamada sociedad. El egocentrismo fue creciendo de una manera que me convertí en yo y los otros. Siempre pedí el que me dejaran tranquilo y el hacer mi voluntad, así transcurrieron los años hasta que de una manera u otra me fui quedando solo y entonces me di cuenta que esa soledad era algo mucho mas molesto que cualquier otro estado donde pudiera estar, pues no me conocía y mi compañía era totalmente desconocida para mi, me sentí con miedo, deje de ponerme en contra de las cosas y comencé a pensar que tal vez la sociedad y sus cosas no eran tan molestas. YO y mis exageraciones me llevaron al otro extremo, donde perdí por completo el individualismo y comencé a ser lo que pensaba que los otros, querían que fuera, mi motivación era el miedo a la soledad, además de no tener la oportunidad de tener que conocerme, pues era mas fácil encasillar y juzgar a otros que tener que reparar tantas cosas conmigo. Este estado de complacencia me llevo a un letargo que con el tiempo comenzó a ser también molesto, donde hacia las cosas pero no sabia realmente que era lo que quería, comencé a pensar si realmente he amado a alguien, si he llorado, si he sentido realmente sentimientos de compasión, de alegría, de esperanza, de afecto, ect…, y de todas esas cosas que me separan del estado animal y me convierten en humano. Entonces empecé a reconstruirme, a crear es nuevo yo, a separar lo bueno y lo malo de mi. A sentir compasión sin tener que deprimirme por lo que no puedo cambiar; a sentir alegría sin necesidad de buscar la euforia; a sentir afecto sin tener que esperar ni desear nada a cambio; y lo mas importante empecé a amar a los otros después que me aprendí a amar a mi mismo. Todo esto es parte de mi locura o cordura, no lo se, lo que si estoy claro es que me queda mucho por vivir y el tiempo pasado no fue perdido, sino aprovechado.